EUROPA
PRESS
2 octubre
2018
¿Por
qué la salud mental y el envejecimiento van de la mano? 4 formas de ayudar a
estas personas
El envejecimiento y la salud mental son
dos temas que históricamente nunca se habían abordado de manera conjunta. No
obstante, sí que es cierto que personas con problemas de salud mental en la
juventud fallecían a edades tempranas. En la actualidad, precisamente porque
hay más medios y avances, estas personas se cuidan muy bien, envejecen mejor, y
la esperanza de vida es mayor que en años anteriores.
Además, hay que tener en cuenta que al envejecimiento de las
personas que conviven con algún problema de salud mental o trastorno mental
grave es un fenómeno al que, tradicionalmente, se le ha prestado poco atención.
"Un 20-25% de mayores de 65 en estos momentos envejecen
con problemas de salud mental ya diagnosticados, o estos les son diagnosticados
en esa época. Es un problema por tanto relativamente nuevo y que no se ha
tratado hasta ahora desde una perspectiva integral", subraya en una
entrevista con Infosalus María José Abraham,
directora general de la Fundación Edad&Vida, con
motivo del Día Internacional de las Personas de Edad.
Sin embargo, desde la Fundación celebran que los avances
médicos y el aumento de la esperanza de vida han hecho que esta situación
cambie y que lo siga haciendo, ya que las previsiones demográficas apuntan a
que, entre 2015 y 2050, la proporción de la población mundial mayor de 60 años
se multiplicará casi por dos, pasando del 12% al 22%.
Sobre la problemática de las personas mayores con algún tipo
de enfermedad mental de base, Abraham sostiene que la enfermedad mental en
España siempre ha estado "estigmatizada" y solía por ello ocultarse.
"Si a esto se le une que al hacerse mayor se asocian
problemas asociados con la edad, se juntan dos maneras de estigmatizar a la
gente, por la propia enfermedad y otra por la edad. Asimismo estaría el sexo,
ya que antes de los 65 años los trastornos mentales graves tenían mayor
prevalencia en los hombres, pero a partir de esa edad se produce una inversión
del fenómeno y los problemas de salud mental son más comunes en mujeres",
añade.
Emilia Serra, catedrática de Psicología del Desarrollo en la
Universidad de Valencia y codirectora del Master Interuniversitario de Psicogerontología, apuntó en unas jornadas organizadas
recientemente por la fundación en Valencia que, "a partir de los 65 años
aparecen más trastornos en las mujeres, especialmente por los trastornos
depresivos y la ansiedad, mientras que los hombres los interiorizan más,
cayendo en las adicciones".
A juicio de la académica, existe un círculo vicioso que
impide romper el estigma de las personas con trastornos mentales mediante una
serie de conductas discriminatorias que lleva a su exclusión social.
"Debido al aumento de población mayor, se produce, a su vez, un aumento de
los problemas mentales, lo que conllevará también implicaciones en los sistemas
de salud pública y social", advirtió.
¿De qué manera se
les puede ayudar?
Según apunta María José Abraham, directora general de la
Fundación Edad&Vida, la Organización Mundial de
la Salud (OMS) establece 4 puntos para mejorar los derechos de estas personas:
1. Promover el
envejecimiento activo y saludable, y en concreto el de estas personas en
particular.
2. Favorecer el
reconocimiento y tratamiento rápido de estas enfermedades a través de la
medicación y de intervenciones psicosociales.
3. Proporcionar la
atención en materia de salud mental dentro de la comunidad, integrándola dentro
del sistema sanitario.
4. Desarrollar un
entorno legislativo apropiado, y apoyado en estándares de derechos humanos
internacionalmente reconocidos para garantizar la calidad de vida de los
adultos mayores con enfermedades mentales, y sin olvidar a los cuidadores y a
las familias, que son los que soportan la mayor carga.
Según datos de la OMS, las cifras globales de trastornos
mentales en la vejez en Europa pueden alcanzar a una cuarta parte de los
mayores de 65 años que viven en la comunidad; es decir, el 75% de las personas
mayores envejecen "relativamente bien", según apostilla la Fundación.